LA REFORMA AGRARIA

Uno de los graves problemas del país era el atraso de la agricultura. Los campos se cultivaban con métodos antiguos y much mano de obra. Era necesario además poner en circulación las tierras de los mayorazgos y las manos muertas para que burgueses emprendedores introdujeran nuevos métodos y técnicas.

Una agricultura avanzada, que usa poca mano de obra, es necesaria para el desarrollo de un mercado industrial: proporciona trabajadores (los expulsados de los campos), beneficios que se pueden invertir en la industria, alimentación más barata lo que permite crear un mercado para otros productos. Aunque en este momento los países industrializados ran minoría y podían encontrar consumidores de sus productos en otros países, entre la gente acomodada, a la larga -a medida que otros países se industrializan y aumenta la competencia- es necesario contar con un mercado interno.

La reforma agraria

Para pasar de una agricultura antigua a una economía de mercado capitalista, era necesaio:

1).- establecer la propiedad privada (única fuente de poder de la burguesía) y eliminar los mayorazgos y las manos muerrtas. Generalmente la aristocracia o la Iglesia tenían una mentalidad más antigua y no habían necesitado -para tener poder- desarrollar la producción en sentido capitalista.

2).-Liberalizar los mercados

3).- eliminar las trabas a la producción. Los gremios tenían privilegios y se oponían a la industria libre.

En este contexto se producen:

1).-las desamortizaciones de Mendizabal, que afectan a la Iglesia, la que recibe una compensación ("dotación de culto y clero").

2).-La Ley Madoz de 1855

Las desamortizaciones afectan en este caso a los bienes de propios de los ayuntamientos. En principio pretendían favorecer a los campesinos de las perversas consecuencias de las desamortizaciones y de la abolición de los señoríos que les habían expulsado de las tierras en las que siempre habían vivido y trabajado.

Pero los problemas de la Hacienda pública causaron que los beneficios se destinaran también a amortizar la deuda pública y la construcción del ferrocarril. Nuevamente los campesinos fueron negativamente afectados.

La situación fue especialmente grave en Castilla, donde se puede decir que la nobleza robó las tierras a los campesinos. Según Francico J. Hernández Montalbán (pagina 13), no fue un problema de las leyes (ni tampoco de las decisiones de las Cortes de Cádiz), sino de la tergiversación que de ellas hicieron tribunales y jueces a favor de la noblea. En demasiadas ocasiones se recono´ció la propiedad territorial a la nobleza sin que esta pesentara el más mínimo título de la misma.

(Leed la nota de la página 13)